El público empieza a impacientarse. Fabiano Caruana parece ser el único dispuesto a dar un paso al frente en este encuentro por el Campeonato del Mundo de Ajedrez que podría pasar a la historia como el más aburrido, si el panorama no empieza a cambiar en las últimas partidas. Todos parecen coincidir en que Magnus Carlsen es el que más culpa tiene de esto.