Los 5 ajedrecistas más peligrosos de la historia

Hay mucho debate sobre quiénes son los mejores ajedrecistas, pero hoy nos interesan los asesinos más peligrosos del campo de batalla de ajedrez.

Magnus Carlsen puede ser el más grande de la historia, pero sus partidas están marcadas por una precisión muy tranquila y una precisión consistente. 

¿Quiénes son los jugadores más amenazantes, los que pueden borrar a sus oponentes del tablero de un soplido? Aunque estos jugadores peligrosos también son muy precisos, añaden otra presencia a sus batallas de ajedrez: una intimidante sensación de peligro.

Aquí tienes los cinco ajedrecistas más peligrosos de todos los tiempos y una partida de ataque ejemplar de cada uno.

Cuéntanos en los comentarios cuáles son para ti los ajedrecistas y las partidas más salvajes.

5. Mijaíl Tal

Mijaíl Tal

Es bien sabido que Tal fue un genio del ajedrez, seguramente el atacante más creativo de todos los tiempos. El GM Serper precisamente publicó esta semana una columna sobre el secreto de ataque de Tal.

En su partida, Tal no solo expone el rey de su oponente, sino que arrasa con todo su flanco de rey, con el desafortunado monarca negro ocupando un asombroso rectángulo de 18 casillas sin una pieza o peón amigos mientras es aniquilado por las piezas pesadas de Tal.

Esto es lo que pasa cuando te enfrentas a Tal en su tierra natal: Riga.

4. Paul Morphy

Paul Morphy

Repasar las partidas de Morphy en 2018 es como observar a un viajero en el tiempo derrotar a los inferiores jugadores antiguos. Su estilo de ataque, simple pero brutal, te hace sentir que puedes entender el propósito de cada jugada que se hace, y por eso el resultado final no es solo devastador, sino bello.

En esta partida, Morphy solo necesita 19 jugadas para demoler por completo a Adolf Anderssen, uno de los mejores ajedrecistas de su era. Las torres de las negras en la posición final parecen testigos inútiles del regicidio que tiene lugar sobre el tablero.

3. Garri Kaspárov

Garri Kaspárov

Kaspárov es uno de los mayores ajedrecistas de todos los tiempos (Carlsen, Fischer, Kaspárov en algún orden), así que no es sorprendente que sea además uno de los más peligrosos.

Kaspárov en la cima de su carrera era quizá el oponente más intimidante al que podías enfrentarte, y un gran ejemplo de esto es la paliza que le dio al que después sería campeón mundial, Vladímir Krámnik, que también puede considerarse uno de los mejores ajedrecistas que han existido.

Aquí Kaspárov se repone de una oferta de sacrificio de caballo poco sensata añadiendo a esta la dama, y saliendo de ello con una nueva dama y luego ganando la dama de Krámnik para poner fin a la partida. ¿Cuántos de vosotros avanzaríais tranquilamente una casilla con vuestro peón de "h" inmediatamente después de que vuestro oponente amenace tu pieza más valiosa?

2. Bobby Fischer

Bobby Fischer

Fischer no requiere presentación aquí, pues es conocido universalmente como uno de los grandes competidores de la historia, no solo en el ajedrez sino en cualquier afán competitivo.

Fischer tenía una mente obsesiva y probablemente el mayor deseo de ganar en la historia del ajedrez, y eso dio como resultado algunas verdaderas matanzas sobre el tablero. Jugando contra el ultrasólido Tigran Petrosián una Caro-Kann igualmente sensata deben ser unas tablas garantizadas en el mejor de los casos, ¿no? Pues no para Fischer.

Petrosián comete un pequeño error al tomar un peón lateral y Fischer le hace pagar de la forma más eficaz posible, forzando el abandono en solo tres movimientos, lanzando una red de mate ineludible sobre el rey del excampeón mundial.

Cualquiera que conozca mis inclinaciones en el ajedrez podría predecir mi "jugador" número uno en esta lista.

Pero Alphazero se merece el primer puesto. Al menos con el resto de jugadores en esta lista, cuando las víctimas son vencidas saben qué les está pasando.

Ese no fue el caso de AlphaZero, cuyas nociones del ajedrez y su estilo de ataque despiadado e intuitivo están tan por encima de todo lo demás que sus oponentes ni siquiera se dan cuenta de que están perdiendo. Observa cómo la segunda mejor entidad de juego del ajedrez (de la historia) evalúa contenta su posición como buena, hasta el mismo momento en que esta está totalmente arruinada.

Esta tiene mi voto como la mejor partida de ajedrez jamás jugada.